martes, 20 de septiembre de 2011

III. IMPACTO DE LA ESCOLARIDAD EN LOS MERCADOS DE TRABAJO Y EN LA DISTRIBUCIÓN DEL INGRESO: EL CASO DE MÉXICO (1960-1970)

    Al analizar el papel desempeñado por la educación experimentada por el sistema escolar durante la década de los sesenta, a pesar de su considerable magnitud, no favoreció significativamente la movilidad social intergeneracional.
   En este capítulo se examinan con detenimiento las relaciones existentes entre el egreso escolar y los mercados laborales, así como los efectos generados por estas relaciones en la distribución del ingreso.
    Durante dichos años existió un desequilibrio evidente entre la estructura del sistema escolar y la demanda de los mercados de trabajo, que causa el desaprovechamiento de la mayor parte de los recursos humanos del país. Esto obstaculiza el desempeño de la función que se atribuye al sistema educativo como agente de la movilidad social ascendente.
    Asimismo, se localizó en 1970 una correlación positiva entre los niveles de instrucción de la PEA y los grados de concentración del ingreso dentro de cada estrato educativo. Esto refleja el poder diferencial con que acuden a los mercados de trabajo quienes tienen también el poder necesario para aprovechar las oportunidades educativas prestigiadas.
Se dice que no es posible que el desequilibrio mencionado se corrija sustancialmente si sólo se mejoran las tasas de retención del sistema escolar ya que en los censos hechos en los años 1960 y 1970 permite anticipar que se seguirá manteniendo el ingreso relativo de quienes adquieran poca escolaridad además del deterioro en el ingreso relativo promedio de quienes ingresen al nivel medio de enseñanza. De esta manera, los nuevos egresados de la enseñanza media recibirían aproximadamente ingresos que habían correspondido a quienes obtuvieron menores niveles de instrucción. Así pues, se iniciaría también un deterioro del ingreso relativo de quienes logran acceso al nivel superior de enseñanza.
   Por último, el análisis hecho en este apartado parte de la política escolar que tiene en sí misma una capacidad muy limitada para combatir los problemas del desempleo. Por el contrario, la distribución desigual del ingreso seguirá propiciando una estructura de demanda cuya satisfacción requiere tecnologías incompatibles con los perfiles de recursos humanos disponibles en el país, por lo cual es incapaz de asegurar su pleno aprovechamiento.

   En mi opinión puedo agregar que en algunas ocasiones el número de egresados de distintos niveles de educación no es tan grande como en la demanda de empleos en el mercado laboral, además cada día la sociedad requiere con la implementación de nuevas tecnologías para que se pueda responder a las distintas necesidades que tiene el ser humano como persona y en conjunto como miembro de una sociedad, esto a su vez es una alternativa que podemos emplear para la demanda de empleo que existe hoy en día en nuestro país.

Referencia:
Muñoz I., C. (1996), Impacto de la escolaridad en los mercados de trabajo y en la distribución del ingreso: El caso de México (1960-1970). En Origen y consecuencias de las desigualdades educativas, (pp. 90-123). México D.F., Fondo de Cultura Económica.

II. FACTORES DETERMINANTES DE LAS DESIGUALDADES DEL RENDIMIENTO ESCOLAR EN LA EDUCACIÓN PRIMARIA.

    La investigación de las relaciones existentes entre el rendimiento escolar, por una parte, y las características individuales de los estudiantes, las características del ambiente en que se recibe la educación, los recursos humanos y físicos de las escuelas y varios indicadores de la calidad de la enseñanza que se imparte, por la otra, ha sido tema que ha ocupado esporádicamente la atención de los educadores y de los especialistas en otras ramas de las ciencias sociales durante los últimos años. El primer problema que enfrenta quien intenta realizar una investigación de este tipo es la ausencia de un criterio plenamente aceptado para definir el rendimiento escolar o la variable dependiente en estas investigaciones.
Al realizar el estudio podríamos decir que no se pudo basar en las calificaciones que cada maestro asigna a sus alumnos, pues éstas dependen de criterios que varían sustancialmente de un caso a otro.
    Dichos estudios revelan que las escuelas que cuentan con los mejores edificios, disponen también de recursos didácticos de mejor calidad y de maestros que tienen niveles más altos de habilidades y más años de servicio tienen un aprendizaje con más alto nivel que el de las escuelas que no cuentan con los mismos. Asimismo, la escolaridad de los maestros esta asociada con sus niveles de habilidades y con su experiencia; por lo que tampoco se puede determinar el efecto independiente que cada una se estas características del magisterio ejerce sobe el rendimiento de los alumnos. También se observó que a medida que los maestros adquieren más experiencia, parecen tender a confiar más en su propio criterio para evaluar a sus alumnos.
    Por último, la necesidad de realizar numerosos esfuerzos de investigación que permitan conocer más adecuadamente los mecanismos por los cuales la características de los estudiantes predeterminan sus logros educativos; ya que sólo así se podrían buscar los medios por los cuales sea posible alterar los efectos que fueron planteados.

    Al concluir esto, podemos mencionar que la educación tiene diversos factores que influirán en ella, en este caso se basaron en alguna encuesta que se realizó a diferentes escuelas que determinaron los factores que están presentes en la educación básica como por ejemplo instalaciones apropiadas para el aprendizaje así como maestros con mayor número de años de experiencia. Relacionando esto con un concepto observado en clase podemos mencionar la marginalidad ya que los alumnos que estudian en escuelas rurales o indígenas no cuentan con la instalación ni los materiales necesarios para un aprendizaje apropiado. Además en los grupos con maestros que no tienen mucha experiencia pueden tener una desventaja ante otros docentes que si la tienen creando así una desigualdad en el aprendizaje de algunos alumnos de determinadas instituciones con otros.





Referencia:
Muñoz I., C. (1996), Factores determinantes de las desigualdades del rendimiento escolar en la educación primaria. En Origen y consecuencias de las desigualdades educativas, (pp. 64-89). México D.F., Fondo de Cultura Económica.

I. ANÁLISIS DEL PAPEL DE LA EDUCACIÓN FORMAL EN LA TRANSMISIÓN INTEGRACIONAL DE LAS DESIGALDADES SOCIALES: EL CASO DE MÉXICO (1958-1970)

    En este artículo de sistematizan los resultados de diversas investigaciones que han contribuido al análisis del papel que desempeña la educación formal en la transmisión intergeneracional de las desigualdades sociales. De igual manera se analizan primeramente los sexenios de Adolfo López Mateos y Gustavo Díaz Ordaz además de la ejecución del Plan de Once Años para la Expansión y el Mejoramiento de la Educación Primaria. Seguido del análisis de la forma en la que repercutió el desarrollo educativo en la eficiencia interna del sistema escolar y en el gasto educativo del país.
     Se puede mencionar por ejemplo que entre los años de 1950 y 1970 la demanda potencial correspondiente a todos los niveles básicos aumentó considerablemente en un 54.6 por ciento; con esto podemos evaluar el desarrollo del sistema escolar del país desde los puntos de vista de su suficiencia en relación con el crecimiento demográfico, su eficiencia interna y su eficiencia externa. Por otra parte podemos indicar que a pesar de los esfuerzos realizados, particularmente por el Gobierno Federal, durante los dos últimos sexenios gubernamentales, la expansión del sistema escolar fue insuficiente para absorber a los individuos que se incorporan durante ese lapso a la demanda potencial de los distintos niveles de escolaridad.     Asimismo, la política de expansión que siguió en el país no prestó suficiente atención a la eficiencia  interna del sistema con consecuencias como la deserción entre los distintos grados de las escuelas primarias rurales y esto a su vez marcó más la demanda escolar en escuelas urbanas que las rurales.
   Posteriormente la demanda escolar evolucionó mostrando que la educación primaria aumentó con mayor rapidez en las comunidades rurales que en las urbanas. Por tanto, las zonas sociogeográficas rezagadas tendieron a acercarse a las avanzadas.
Finalmente, el análisis se dedujo que el desarrollo educativo del país fue el resultado de la interacción de diversos factores, la mayoría de los cuales dependió, a su vez, del sistema de estratificación social, definido fundamentalmente por las estructuras del poder y propiedad en la sociedad.

     En conclusión, podemos decir que la educación ha tenido variantes en cuanto al acceso que tienen las personas a ella, debido a que no todos tienen las mismas igualdades conforme a su acceso. Y a pesar de los esfuerzos del gobierno por aumentar el número de matrícula en los niveles educativos, esta no abastece a la demanda de alumnos que desean ingresar a los niveles educativos creando así un rezago en diferentes sectores de la población además de un aumento en el número de personas conforme a la población no atendida. Dicho rezago no sólo afecta al sector de la población que es no atendida si no a la población en general ya que disminuye el número de personas con alguna preparación académica que pueda aportar nuevas ideas y/o conocimientos para beneficio de esta.

Referencia:
Muñoz I., C. (1996), Análisis del papel de la educación formal en la transmisión intergeneracional de las desigualdades sociales: El caso de México (1958-1970). En Origen y consecuencias de las desigualdades educativas, (pp. 17-67). México D.F., Fondo de Cultura Económica.

martes, 6 de septiembre de 2011

Ana Karen Soto Hernández 1 "A"
Problemas y Políticas de la Educación Básica I
Lic. en Educación Secundaria con Epecialidad en Telesecundaria
Benemérita Escuela Normal Veracruzana